diumenge, 22 de juliol del 2018

Casado con el programa que le ha hecho líder del pp

foto de El Rincón del Kikirikiii.

El nou pp de sempre

Les Coves de Vinromà regenerarà amb ceràmica el sender urbà d'accés al nucli urbà (ja no serà possible quedar tercers de tres)


 
Veinticinco municipios de la provincia de Castellón impulsarán el uso de la cerámica en sus calles y plazas
Cederán espacios para empezar a hacer de la cerámica un elemento constante en el paisaje urbano provincial

El Plan Cerámico de Regeneración Urbana de la Diputación de Castellón impulsará la cerámica en el paisaje urbano de la provincia. Esta ambiciosa iniciativa, en la que la Diputación invierte 325.000 euros, cuenta con la participación de empresas cerámicas referentes y los colegios y asociaciones profesionales relacionados con esta actividad
Veinticinco municipios de la provincia de Castellón impulsarán el uso de la cerámica en sus calles y plazas
Castellón Información

La Diputación de Castellón suma a 25 municipios de la provincia a su apuesta por la cerámica en espacios urbanos. Así, son un total de 25 ayuntamientos los que cederán espacios de sus municipios para participar en el Plan Cerámico de Regeneración Urbana a través del que la Diputación, y con el acuerdo de todos los agentes implicados en el sector cerámico, se plantea empezar a convertir a la cerámica castellonense en un elemento constante del paisaje urbano provincial.

El diputado de Promoción Económica, Salvador Aguilella, ha asegurado que “la acogida de los ayuntamientos ha sido muy buena. Esta actuación nace para mejorar nuestros pueblos con el material que tantas alegrías nos da a diario en la provincia. Estamos muy orgullosos del sector motor del empleo industrial en Castellón, y con este gran pacto conseguiremos que lo que ya es una constante en nuestros hogares, en los hogares de todo el mundo, cada vez lo sea más en las calles y espacios públicos. Es un primer paso para conseguir que la cerámica de Castellón sea el material preferente en los usos urbanos de otros lugares de nuestro país”.

Hay que tener en cuenta que, además de la implicación de estos municipios en los que se llevará a cabo el plan, esta ambiciosa iniciativa en la que la Diputación invierte 325.000 euros, cuenta con la participación de empresas cerámicas referentes y los colegios y asociaciones profesionales relacionados con esta actividad. Así, hay que tener en cuenta que en la elaboración de este plan han participado colectivos como Ascer, Asebec, Anffecc, ITC, ATC, Sociedad Española de Cerámica y Vidrio Colegio de Arquitectos Técnicos, Colegio de Arquitectos y ya lo conocen los ayuntamientos de la provincia, empresas cerámicas y demás profesionales interesados.

Concurso ‘Som Ceràmica’

La Diputación invertirá 325.000 euros en materializarlo de acuerdo a su eje estratégico de poner en valor ese elemento que identifica a la provincia al tiempo que será tractor de oportunidades, de talento y de las mejores ideas. Hay que tener en cuenta que esa inversión se desglosa en 295.500 euros para la ejecución de la obra y 32.500 euros para la redacción y dirección de los proyectos.

“Es un plan que llega tras escuchar las demandas de nuestros pueblos y del sector para ofrecer una solución conjunta, donde todos salimos ganando”, ha concluido el diputado, quien ha animado a los pueblos “a participar, a pensar en qué espacios pueden mejorarse con soluciones constructivas que tengan la cerámica de Castellón como producto protagonista. Estamos seguros de que los resultados van a ser muy positivos”.

A partir de ahí que los ayuntamientos formalicen esta cesión, comenzará la segunda parte del Plan, el ‘Concurso Som Ceràmica a la Regeneración Urbana‘. Consiste en un concurso de ideas dirigido a equipos multidisciplinares en arquitectura, ingeniería y planificación para desarrollar los proyectos de mejora que propondrán a los ayuntamientos. Los tres proyectos ganadores, elegidos por un jurado técnico independiente, serán ejecutados y financiados al 100% por la Diputación.

Los municipios que se han adherido y los espacios a regenerar con cerámica gracias a esta iniciativa son: Benicarló (Plaza del Mercado), Xilxes (Plaza Santísimo Cristo), Borriol (Plaza Advazara), Benlloch (Plaça de l´Aljub), Almassora (zona verde Av. Burriana), Coves de Vinromà (sendero urbano de acceso al casco urbano), L’Alcora (espacio urbano entre las calles Camino Norte y Guitarrista Tárrega), Vall d´Alba (Plaza Mayor), Moncofa (Plaza de la Báscula), Geldo (Plaza Morera), San Rafael del Río (paseo-mirador y antiguo lavadero), Lucena del Cid (entorno del Castell), Atzeneta del Maestrat (jardín urbano de la calle Enric Banyuls), Canet lo Roig (Plaza Nueva), Sant Joan de Moró (Plaza del Ayuntamiento), La Llosa (Plaza Calvario), Benicàssim (zona de la Almadrava), Nules (Jardín Botánico), Figueroles (recepción visitantes entorno de las piscinas), Vilafamés (Plaça La Tanca), Gaibiel (Campo Futbito), Montán (Plaza Santa Ana), Argelita (Plaza Pío XII), Vinaròs (Plaza Sant Andreu) y Peñíscola (Plaza Antiguo Colegio Jaime Sanz)
http://www.castelloninformacion.com/plan-ceramico-de-regeneracion-urbana-diputacion-de-castellon-ceramica-en-calles-salvador-aguilella-empresas-ceramicas/

La victoria de Casado debilita al aparato del PPCV y complica la vida a Bonig

RELEVO EN EL PP

El resultado de las primarias alienta a los críticos con la dirección regional, que se volcó en bloque con Sáenz de Santamaría - La propuesta para el comité ejecutivo vaticina futuros contrapoderes en las tres provincias en pleno proceso de listas
Votaciones para elegir al futuro líder del PP
Julia Ruiz Enviada Especial. Madrid 22.07.2018 | 04:15

«No le preguntéis a nadie a quién ha votado. Todos habéis ganado». La frase la pronunció ayer en su discurso el recién elegido presidente nacional del PP, Pablo Casado, en un llamamiento a la unidad del partido y tratando de mandar un mensaje de tranquilidad hacia el bando perdedor. A muchos, en el PP de la Comunitat Valenciana, les vendría bien que así fuera, pero hasta los más optimistas dan por hecho que la guerra abierta por el relevo de Mariano Rajoy tendrá consecuencias en un territorio en el que su presidenta, Isabel Bonig, se mantuvo neutral, pero cuyo aparato estaba volcado en cuerpo y alma con Soraya Sáenz de Santamaría.
Votaciones para elegir al futuro líder del PP
Casado ganó ayer con holgura a su contrincante (un 60% de los votos), y ello a pesar de que, en el caso de la Comunitat Valenciana, todas las direcciones provinciales y el grueso de la dirección regional habían trabajando activamente por hacer ganadora a la exvicepresidenta del Gobierno. A favor han trabajado otros dirigentes (algunos se unieron desde el principio y otros, después,al fracasar la opción de Dolores de Cospedal), un bloque hetereogéneo que engloba, desde los que comparten sin más el proyecto político de Casado, hasta quienes están descontentos con la lideresa o directamente en su contra por quedar fuera de los círculos de poder. Estos últimos se crecieron ayer tras la derrota
de Santamaría y es de esperar que aspiren a recuperar influencia en el partido.
Votaciones para elegir al futuro líder del PP
«Se nos van a poner las cosas difíciles», confesaba ayer un destacado dirigente que forma parte del núcleo duro de Bonig y que estos días se había batido el cobre para convencer a los compromisarios y compromisarias valencianas para que apoyaran a Santamaría.
Votaciones para elegir al futuro líder del PP
En este contexto, todo apunta a que la victoria de Casado precipita una crisis interna en el PP de Isabel Bonig cuando apenas quedan ocho meses para las elecciones autonómicas y municipales y se está en pleno proceso de confección de candidaturas electorales.

A corto plazo, el futuro de la lideresa y su equipo no se cuestiona. Otra cosa será a partir de las elecciones. Desde la candidatura de Casado se da por hecho que Bonig será el cartel electoral e incluso ayer seguían valorando el hecho de que se haya mantenido neutral en el proceso, sin ejercer presiones. Estas fuentes aseguran que no hay ánimo de revancha y que el objetivo es ganar las elecciones. Ahora bien, admiten que han tomado nota de quienes consideran han jugado sucio en la campaña.

Por su parte, desde el entorno de la lideresa se aseguraba que se encara el resultado de las primarias con total tranquilidad, al tiempo que se recordaba que Bonig ganó su congreso regional por primarias y está tan legitimada por las bases como Casado. Cuestionarla sería descabellado y un suicidio político con las elecciones a la vuelta de la equina.

Pero, su neutralidad la debilita en la medida en que este proceso supone un serio revés para los barones provinciales en los que ella ha sustentado su liderazgo. La derrota se produce, además, en el momento en que debe abrirse el proceso para la confección de las listas autonómicas y municipales. El entorno de Bonig se reafirmaba ayer en que tanto la candidatura a las Corts, como la de los municipios (excepto las capitales de provincia) son competencia de la dirección regional. Sin embargo, como en todo, Génova tiene la última palabra y en todo caso, mucho que decir.

Un vistazo a las caras de algunos responsables y, sobre todo, a la lista del comité ejecutivo nacional que ayer adelantó Casado permite augurar turbulencias en los próximos meses y el germen de los futuros contrapoderes a los barones provinciales.

El vaticinio parece especialmente claro en el caso de Alicante. Dos de sus principales apoyos, la secretaria general del PPCV, la alicantina Eva Ortiz, y el presidente provincial de Alicante, José Císcar, se han volcado para recabar votos a favor de Santamaría. Ninguno de ellos logra mantenerse en el comité ejecutivo nacional. El principal contrapeso de Císcar en Alicante, el jefe de la diputación de la provincia, César Sánchez, tiene, en cambio, un sillón reservado. Si Santamaría hubiera ganado, Ortiz y Císcar se habrían quedado. Por si fuera poco, tendrán que seguir lidiando con uno de sus más feroces críticos, el exministro de Exteriores Manuel García Margallo, que se presentó a las primarias y que Casado ha rehabilitado.

Lo mismo ocurre en Castelló. El nombre del presidente del PP provincial, Miguel Barrachina, estaba en la lista de la exvicepresidenta, pero no en la de Casado, quien ha preferido incluir a la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco, uno de los pocos cargos que trabajó activamente para el ya presidente.

En la provincia de València, el principal revés es para el presidente de la gestora, Rubén Moreno, a quien Santamaría prometió despacho en Génova y que ahora pierde influencia.
https://www.levante-emv.com/comunitat-valenciana/2018/07/22/victoria-casado-debilita-aparato-ppcv/1747609.html?utm_source=newsletter&utm_medium=email&utm_campaign=autonewsletter&utm_content=Titulares%20del%20d%C3%83%C2%ADa

Pablo Casado Blanco, declaración oficial de bienes y actividades

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Declaración de Actividades haciendo click sobre el enlace

http://www.congreso.es/docinte/registro_intereses_diputado_309.pdf

Declaración de Bienes y Rentas haciendo click sobre el enlace

http://www.congreso.es/docbienes/leg12/000275/000275_000_e_0000937_20160714.pdf

Foto de Casado Blanco, Pablo

PP
Escaño de Casado Blanco, Pablo
XII Legislatura ( 2016-Actualidad )
Casado Blanco, Pablo
Diputado por Ávila.
G. P. Popular ( GP )
Ficha personal
Nacido el 1 de febrero de 1981 .
Diputado de la X ,  XI y  XII legislaturas.
Casado, una hija y un hijo.

Abogado y economista colegiado en Madrid. Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense, Licenciado en Administración y Dirección de Empresas y Máster en Derecho Autonómico y Local por la Universidad Rey Juan Carlos. Fellow de la SAIS (School of Advanced International Studies) de la Universidad Johns Hopkins en Washington, y visiting professor del Global Leadership and Competiveness Program de la Universidad de Georgetown.

Ha completado su formación académica con el DGP de la Kennedy School of Government de la Universidad de Harvard, el CLS del Government Affairs Institute de la Universidad de Georgetown, el PLGP del IESE, el PLPE de Deusto Business School, el PGP del Instituto de Empresa y el Curso de Mercados Financieros del IEB.

Actualmente es vicesecretario general nacional de comunicación del Partido Popular. En la XI legislatura fue presidente de la comisión de Educación y Deporte. En la X legislatura fue portavoz de la comisión mixta para la Unión Europea, representante en la Asamblea Parlamentaria de la Unión por el Mediterráneo y en la COSAC. De 2009 a 2012 fue director de gabinete del ex Presidente del Gobierno de España, José María Aznar.


pablo.casado@pp.es
Página web

http://pablocasado.es/
Fecha alta: 14/07/2016.


Vocal de la Diputación Permanente
Vocal de la Comisión de Asuntos Exteriores
Vicepresidente Primero de la Comisión Mixta para la Unión Europea
Histórico
Presidente de la Comisión sobre Seguridad Vial y Movilidad Sostenible desde el 28/09/2016 al 27/11/2016
Vocal de la Comisión sobre Seguridad Vial y Movilidad Sostenible desde el 27/11/2016 al 28/11/2016
Vocal de la Comisión de Derechos de la Infancia y Adolescencia desde el 28/09/2016 al 10/01/2017
Vocal de la Comisión Mixta Control Parlam. de la Corporación RTVE y sus Sociedades desde el 16/11/2016 al 10/01/2017
http://www.congreso.es/portal/page/portal/Congreso/Congreso/Diputados/BusqForm?_piref73_1333155_73_1333154_1333154.next_page=/wc/fichaDiputado?idDiputado=309&idLegislatura=12

Intervención de Jose Luis Ábalos

Rueda de Prensa de presentación de las conclusiones del Seminario de Ver...

José Mari padre de gemelos

foto de Maria Victoria Gregorio Pastor.

Pablo Casado Blanco, president del pp con el voto del 0,002 de los afiliados

foto de Pablo Casado.

El tapado

foto de Omar caricaturas.

Con el viejoven Casado vuelve Aznar (y Reagan y Thatcher)

El nuevo presidente del PP tiene un programa neoliberal. ¿Puede ganar así unas elecciones?
Ricardo de Querol
Resultado de imagen de pablo casado la guerra del abuelo
21 JUL 2018 - 20:47 CEST
Se consumó el descalabro del rajoyismo (¿se dice así?) y la revancha del aznarismo. La primera elección de líder de la derecha con participación de las bases ha terminado en una censura de esa política de mínimos desprovista de ideología, de esa concepción del PP como un grupo de eficaces gestores insípidos e incoloros, de esa actitud contemplativa ante los problemas esperando que los demás se quemen más. Por contra, se reivindica el legado de Aznar: una derecha que se dice sin complejos, liberal en lo económico pero tirando a reaccionaria en lo social, que da la batalla sin cuartel a las causas del progresismo, el feminismo o el cosmopolitismo.


Apenas se ha usado la palabra rajoyismo (¿diríamos mejor rajoísmo?) porque no existe una tendencia política que se pueda llamar así. Rajoy tuvo una autoridad indiscutida mientras tuvo el poder, pero no deja huella de su ideario, y eso es lo que ha terminado con las aspiraciones de la que parecía llamada a ser su continuadora, Soraya Sáenz de Santamaría, quien eludió el cara a cara con su rival y nunca expuso un programa claro.



Es el turno de Pablo Casado, que ha hecho una campaña muy meritoria venciendo todos los obstáculos de salida (las sospechas sobre su currículum incluidas) hasta reunir los apoyos necesarios. Si cumple sus promesas recientes, ahora viene el viraje a estribor. El giro a la derecha que se dice desacomplejada. El referente vuelve a ser Aznar.

Claro que, cabe preguntarse, ¿qué Aznar se reivindica ahora? ¿El Aznar de 1996, el que se definía de “centro reformista”, el que hablaba catalán en la intimidad, el que completó las transferencias de educación y sanidad a las comunidades autónomas, el que acercó presos de ETA y autorizó la negociación con el “movimiento vasco de liberación”? ¿O el Aznar de 2000 a 2004, el que con mayoría absoluta prescindió de cualquier alianza, el que metió a España en la guerra de Irak en contra de la opinión pública y de sus tradicionales aliados europeos? ¿El que decidió sucesor desde la prepotencia de su cuaderno azul, el que luego arruinó sus posibilidades con una gestión falaz de la matanza del 11M? ¿El Aznar endiosado de la boda en El Escorial, el que formó gobiernos repletos de gente que hoy está encarcelada, condenada o imputada? ¿El liberal que privatizaba empresas pero seguía nombrando a sus presidentes con el mando a distancia, el que promocionó a compañeros de pupitre como Villalonga o a viejos amigos y socios como Blesa?

Peor aún, ¿se está reivindicando al Aznar atrincherado en FAES como azote del sucesor al que eligió a dedo y que luego le decepcionó? ¿El Aznar que piropeaba a Rivera mientras reprochaba a Rajoy su debilidad ante el nacionalismo catalán? ¿El que renunció dolido a la presidencia del honor del PP pero ahora se queja de que no le invitan al congreso?

La derecha española reniega del centrismo atribuido al equipo de Rajoy, que más bien era tecnocracia, hasta caricaturizar al expresidente como un socialdemócrata infiltrado
La derecha española tenía que elegir rumbo y ha decidido. Reniega del centrismo atribuido al equipo de Rajoy, que más bien era tecnocracia, hasta caricaturizar al expresidente como un socialdemócrata infiltrado. Está por ver que esa derechización ensanche la base del PP: desde luego sí puede movilizarar a su gente de toda la vida. Pablo Casado quiere ocupar todo a la derecha del PSOE, lo que obviamente incluye a la extrema derecha. Y no se ha cortado en cortejar a los votantes de Vox (47.000, un 0,20% del censo en 2016), ese partido cuya mayor gesta ha sido desplegar una bandera española en Gibraltar sin lograr que se rinda la pérfida Albión.

Tras una apariencia renovadora y un discurso sin duda brillante, Casado ha lanzado mensajes preocupantes para quienes creemos en la moderación y en los valores compartidos de las democracias europeas, hoy en cuestión. Ha dicho que el Tratado de Schengen, que permite la libre circulación de los europeos, “se podrá suprimir si no hay garantías de que a España se la respete”, en respuesta a la decisión de la justicia alemana de no permitir la entrega de Puigdemont para ser juzgado por rebelión.

Ha animado a la derecha a “combatir la ideología de género”, que es como los obispos que representan el catolicismo más tradicionalista llaman a la lucha por los derechos de la mujer y los de homosexuales o transexuales. Ha defendido volver a la ley del aborto de 1985, la de supuestos que en su día combatió la derecha, y que quedó superada en 2010 con un modelo, la actual ley de plazos, mucho más acorde con lo habitual en Europa. Ha pedido un mayor control de la inmigración, aunque afortunadamente no ha hecho bandera de este tema como sí ha hecho la derecha de otros países. Y se ha opuesto a que se saque el cuerpo de Franco del Valle de los Caídos con el argumento de que no merece la pena gastar un euro en eso, como si este debate fuera sobre el dinero que costaría y no sobre si la memoria del dictador merecía tan aparatoso mausoleo construido por mano de obra forzada.

El Casado de estas primarias quiere competir con Ciudadanos en agarrar bien fuerte la bandera de España y marcar un perfil duro ante el procés. La apelación a la “España de los balcones” va en ese sentido, también la idea de endurecer el código penal sobre la sedición y los referendos. Y, esto ya chirría más, la propuesta de ilegalizar a los partidos independentistas. Eso, pregunto, ¿a dónde nos llevaría? ¿Estaría más cerca de qué solución? ¿Quién ganaría la batalla de la imagen en el exterior? ¿Vendría un 155 perpetuo? No vale remitirse al ejemplo de Batasuna, porque en 2002 no hablábamos de independentismo sino de tiros en la nuca. Y hay doctrina del Constitucional sobre su rehabilitación con la marca Bildu, por cierto.

En el terreno económico, Casado promete una “revolución fiscal”, una bajada agresiva de impuestos que parece difícilmente viable en una España que aún no ha salido de la vigilancia de la UE por déficit excesivo, salvo que viniera acompañado de recortes del gasto igualmente drásticos. Plantea Casado un tipo máximo de IRPF por debajo del 40%, abolir los impuestos de sucesiones, donaciones y patrimonio y, lo más atrevido, un impuesto de sociedades al 10%, con deducciones ampliadas por innovación. Esto último va en dirección contraria a lo que está haciendo el Gobierno socialista (que quiere asegurarse un tipo efectivo mínimo del 15%) y trataría de situar a España en la pugna con Irlanda, Luxemburgo u Holanda por la fiscalidad más benigna para las empresas de la UE.

Esta revolución fiscal es coherente, vamos a admitirlo, con el liberalismo al que se pone el prefijo neo, el que surgió en los años ochenta de la mano de Reagan y Thatcher, y cuya impronta se percibe aún hoy en la reforma fiscal de Trump. Casado ha incorporado a su equipo a Daniel Lacalle, conocido por sus libros y conferencias en que defiende con ardor y solvencia las tesis ultraliberales; y aquí con ultra solo quiero decir “muy”. (Breve inciso de contexto histórico: en los años de Reagan y Thatcher sí que había ultras de un falso liberalismo, aquellos muy preocupados por las libertades de mercado y nada por las políticas, así que dictaban sus recetas a dictadores como Pinochet).

En cabeza del sector más neoliberal del PP siempre estuvo Esperanza Aguirre, quien amagó con competir con Rajoy en 2012, antes de que la insoportable sucesión de escándalos de corrupción en su entorno arruinara su carrera. Ahora ha estado con Casado (y particularmente contra Santamaría) con perfil bajo, y no sale en la foto del Jai Alai.

Esa revolución fiscal de Casado y Lacalle solo sería posible con unos tijeretazos masivos al gasto que ríete tú de los recortes de 2012. Sobre esto, un apunte: Rajoy y su ministro Montoro subieron mucho los impuestos ese año, como denuncia el vídeo apócrifo contra Santamaría. Pero Rajoy también aplicó la mayor reducción del gasto público de la democracia, que afectó a cuestiones tan sensibles como la educación, la sanidad o la dependencia. Las dos terapias de choque se aplicaron a la vez en un momento crítico, con el déficit cerca del 10% y España al borde del default. Esa política catapultó a Podemos y se pagó cara en las urnas en 2016. ¿Está dispuesto Casado a defender recortes más duros que aquellos? Por ahora se limita a referirse a una reestructuración de la Administración pública, pero falta claridad sobre qué significa eso. ¿Hablamos de despedir funcionarios? ¿Cuántos, de los dedicados a qué?

No sé si se pueden ganar elecciones en España con un programa tan liberal en la economía y tan conservador en lo social. Claro que siempre cabe una moderación del flamante presidente del PP a partir de ahora. Ya se sabe: las primarias se ganan convenciendo a por los incondicionales, por definición los más sectarios, y las generales se ganan desplazándose al centro para llevarse a los indecisos.

En esto Casado puede seguir el ejemplo, cruel paradoja, de Pedro Sánchez. Que ganó las primarias del PSOE moviéndose por la izquierda, que recibió acusaciones de estar “podemizado”, pero que una vez instalado en La Moncloa no parece ningún extremista, e incluso ha confiado la economía a los (las) tecnócratas. Tanto Sánchez como Casado eran los candidatos menos cercanos al establishment de sus organizaciones, y ambos se llevaron lo que parecían votos de protesta contra el aparato, aunque en el caso de Casado ha resultado crucial el apoyo de Cospedal, y más aparato que ella no había nadie. En el PP a quien se ha castigado en realidad es al Gobierno de estos siete años.

La elección de Casado quizás beneficie a Sánchez. Tendrá un rival correoso, sí, pero lo podrá atacar con dureza como representante de la derecha carca, casposa y beata. A quien no sabemos si beneficia es a Ciudadanos, que bebía del desencanto con Rajoy. Claro que Rivera tiene una oportunidad de oro para moverse y llevarse a ese centro-derecha laico, que no añora a Franco, que no tiene ningún problema con los gays ni con la ley del aborto, y que tampoco quiere desmantelar el Estado del bienestar. Esa derecha tibia a la que se quería dirigir Soraya Sáenz de Santamaría, y que tampoco estaba tan incómoda con Rajoy salvo por el tufo de los casos de corrupción.

En cualquier caso, la elección de Casado sigue el signo de los tiempos, que es la polarización. La derecha se echa al monte en EE UU con Trump o en Italia con Salvini; la izquierda se endurece en Reino Unido con Corbyn o en Francia con Mélenchon. Una polarización más inquietante a diestra que a siniestra, hemos de añadir, porque en demasiado lugares se está jugando con discursos de odio de los que han hecho derramar mucha sangre en el pasado. Macron y Merkel contienen esa marea no sin apuros, sobre todo la segunda.

No digo que Casado vaya a seguir la línea populista, no. Según para qué es muy liberal o muy conservador, pero no ha jugado las cartas trucadas de la xenofobia y la eurofobia. Quién es de verdad Casado lo sabremos en cuanto entremos en tiempo electoral, y ese momento empieza en pocos meses. Entonces comprobaremos si su modelo es el Aznar conciliador de 1996 o el soberbio que arruinó su mayoría absoluta en 2004. O si quizás, quien sabe, empieza a sucumbir a la tentación conformista del rajoyismo. (Aclarada la duda: consultada Fundeu, prefiere rajoyismo a rajoísmo, aunque ambos términos le parecen válidos para indicar una corriente ideológica que, en realidad, consistía en no moverse por ideología alguna).
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2018/07/20/mercados/1532114451_987135.html?id_externo_rsoc=FB_CC

El futuro de España(del pp)

foto de José Antonio Olmeda Salvador.

Fora senyal de trànsit de la Moreria

foto de Vicenç Roda Beltran.

Bon dia, plou i plourà durant el dia