Los militantes socialistas que lucharon contracorriente para devolver a Pedro Sánchez a Ferraz, han dicho basta a la campaña mediática orquestada desde el neoliberalismo contra el líder y su nuevo Psoe. Que el capital lo manda todo, incluidos los grandes medios, es un hecho. Y que a éstos no les conviene que Sánchez gobierne es indiscutible. Engordar a Podemos para que desde la izquierda intente destrozar al Psoe, es una táctica, seguida por ejemplo por Atresmedia y La Sexta, Público, etc. Y agrandar a Ciudadanos desde los cuatro grandes rotativos nacionales y el resto de las televisiones generalistas, Mediaset (Cuatro y Telecinco), es la otra táctica que cierra el círculo de acoso y derribo a Sánchez.
A pesar de las insoportables corrupciones del PP, cuando el Psoe estuvo a punto de mandarlo a la oposición, los grandes medios no lo apoyaron. No les interesaba el discurso socialdemócrata porque temieron perder sus privilegios y sus subvenciones. Vivimos #LaGranOla, no de la Igualdad y la Justicia redistributiva, sino del liberalismo salvaje de mercado. Quién tiene el capital puede comprar medios, y con ello adquiere decibelios para entontecer a las clases medias, aún a pesar de haber sido despojadas por el neoliberalismo de su agenda social y del miserable recorte de derechos y libertades que fueron adquiridos durante los gobiernos socialistas. Con tanto ruido mediático y la aparición de partidos populistas a izquierda y derecha, los medios han conseguido perturbar hasta la memoria de los logros socialistas universales como educación, sanidad, pensiones, igualdad y derechos sociales, que el Psoe implementó en España.
Queda ahora por dilucidar si el hasdtag #NoAlBoicotPeriodisticoAlPSOE lanzado esta semana por la militancia, dará los resultados deseados o si por el contrario los medios lo convertirán en un nuevo acicate para seguir
En este sentido, el autor del artículo, gran conocedor de los medios desde las bambalinas, sabe perfectamente que son las propias redes socialistas las que contribuyen a viralizar masivamente el alcance de la noticia. Al margen de los intereses políticos de los dueños de los medios, que eso es otro tema a debatir, este es el juego trampa en el que, con su mejor intención, los militantes socialistas, enfurecidos por tan injusto tratamiento, caen y contribuyen a lo que sería, vender más periódicos, o dicho de forma actual, obtener millones de visitantes, o lo que es lo mismo mas publicidad. Y así se da una ecuación perversa en los medios que perjudica al socialismo.
En su análisis de las malas relaciones entre Psoe y medios, Santiago Aparicio también señala que "la política de comunicación del partido no acierta al no dar más visibilidad a su SG. ...Es más, esconderse o estar medio oculto, y no porque no le llamen, que lo hacen, es mala estrategia comunicativa. Sus propias bases necesitan ese contacto mediático para reforzarse. Y el PSOE va perdiendo fuelle por ese lado" explica el autor. El periodista acaba su post desvelando el tirón de orejas que al parecer le han dado al Grupo Prisa su nuevos propietarios, exigiendo que su línea editorial debe de ser socialdemócrata como siempre lo fue hasta hace aproximadamente una década.
"....Pero el gran problema del PSOE -concluye Santiago Aparicio- está en las portadas y los editoriales (y en cuestiones internas que no vienen al caso). Que alguien como Victoria Prego diga que Sánchez “no da una” hace daño. Porque ya marca una senda editorial. Y de nada sirve que los nuevos mandamases del grupo Prisa, Javier Monzón y Ana Patricia Botín, hayan dicho a las gentes de Ferraz que El Paísdebe ser un periódico donde la socialdemocracia se sienta representada, porque es un abrazo del oso. El coste de esa supuesta representatividad será la falta de autonomía ya que el establishment no permitirá nunca, jamás, que el PSOE pueda formar gobierno con Podemos. Un quid pro quodonde ganará siempre Prisa, que ha debido ver las orejas al lobo con la pérdida de lectores de su principal cabecera. Decíamos que daba igual esa promesa peligrosa porque el resto de medios, incluso los que se podrían catalogar como más de izquierdas, están en otra operación, llevar al poder a Ciudadanos, con el PSOE de muleta, o sin el PSOE".
En medio de todo esto, la ferviente militancia fiel a Pedro Sánchez y a Ferraz, se siente harta de 'poner la otra mejilla' (un camino que el exquisito respeto por los medios del líder puso en marcha) y quiere dejar constancia de su hartazgo porque un país en el que sus medios principalmente sólo hablan en defensa de los intereses del capitalismo, incluso utilizando impunemente a la mentira y la manipulación de las noticias está muy lejos de representar un Estado con una Democracia sana y plural. Hay que construir entre todos el discurso de la verdad.
#LaGranOla
#PedroSanchez
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