Es curioso, que un alcalde, después de tantos años en el cargo, como lleva el de La Nucia, rehúya sistemáticamente los debates en los plenos. Imaginamos que no debe ser por falta de seguridad al hablar en público. Ya que todos los días tenemos pagados programas, en medios de comunicación, donde ahí sí que se siente como pez en el agua y se explaya, siempre, poniendo el acento en lo bien que lo hace todo, claro está.
Pero cuando llegan los plenos, ahí sí que no, nunca suele responder a las intervenciones de los concejales de la oposición y directamente pasa a la votación. Ya que en ella, en la votación, sí que es más grande.
A veces pensamos que será que no quiere profundizar en ciertos temas, ya que hay cosas que mejor no tocarlas.
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