”Con esta pluma roja firmé el acuerdo del Botànic”. Ximo Puig lo ha dicho con la mano derecha alzada, mostrando la estilográfica a su rival, Rafa García, en el debate primarias celebrado esta mañana en la sede del PSPV. La pluma emergía como icono, como símbolo de lo que más fuerza ha dado al presidente en esta campaña de primarias: la gestión de su Consell. El alcalde de Burjassot, que se presenta como líder del descontento de la militancia, ha intentado trasladar al terreno local la pugna escenificada en las primarias del PSOE: él, Rafa García, se ofrece como alternativa para oxigenar un partido que califica de “muerto”. Quiere emular a Pedro Sánchez en la Comunidad Valenciana. El debate, moderado por la presidenta de la Unió de Periodistes, Noa de la Torre, ha confirmado relatos y propuestas, materia que debería ayudar a los militantes a adoptar su decisión. Pero a diferencia del celebrado en la cadena SER el lunes, esta vez Ximo Puig se ha mostrado más aplomado, y más preparado para la esgrima de su rival, en ocasiones de estoque corto.
Rafa García: “el parido está muerto”. Ximo Puig: “no quiero un proyecto orgánico sectario, lo quiero abierto”
La pluma roja era también una advertencia para Rafa García. “No necesitamos un proyecto orgánico sectario, sino abierto a la sociedad”. Frase de Ximo Puig cuando su rival le insistía en la inoperancia de la actual organización. “El partido no está muerto, está vivo”, insistía el president. En cada bloque, el alcalde de Burjassot ha intentado llevarlo al terreno orgánico, y en cada ocasión Ximo Puig ha vuelto al terreno institucional, a la gestión, a los éxitos logrados por su administración. Rafa García, que buscaba la estocada todo el tiempo, ha llegado a insinuar que la gestión del Consell pertenece a Compromís. Se ha fajado Ximo Puig mejor que en la SER, esperaba los golpes, y tenía preparados más argumentos para contrarrestarlos: “la superioridad moral no la tiene nadie”, “tú hablas mucho Rafa pero participas poco”, “estás obsesionado con la bicefalía mental”, ha llegado a decirle a su oponente.
Modelo de PSPV
¿Cuál es tu proyecto de país? le ha llegado a preguntar el president a Rafa García. Era un bloque clave, en el que se debía explicitar al modelo de PSPV que se quiere potenciar en el futuro. Ximo Puig, que ha usado en gran parte del debate el valenciano, se ha definido como federalista y valencianista. Su rival, que no ha dicho ni una sola palabra en valenciano ha llegado a acusarle de haberse sumado al centralismo de Susana Díaz “que tiene el mismo modelo de España que Mariano Rajoy” y de aceptar la idea andaluza de los “dos ramales” del corredor. Rafa García ha entrado en ese momento en un terreno complejo. Ximo Puig se equivocó en su excesiva apuesta por Susana Díaz, y él lo sabe, ha llegado a pedir perdón, pero no es Susana Díaz, ni nadie puede cuestionar el compromiso federal y valencianista del president. El alcalde de Burjassot ha confundido estrategia con convicción política, planteamiento que debilitaba su ataque.
“¿Cuál es tu proyecto de país Rafa”, pregunta Ximo. “Has defendido el proyecto centralista de Susana Díaz”.
Era evidente que Rafa García deseaba reproducir el esquema de las primarias del PSOE: la militancia contra el “aparato”, contra el liderazgo establecido. Pero esta línea de confrontación ha chocado con la realidad de que en la Comunidad Valenciana el PSPV gobierna, en coalición con Compromís y Podemos. Es otro escenario. El alcalde de Burjassot le ha reconocido el éxito de conquistar la presidencia de la Generalitat “pero con los peores resultados de la historia”, y ha vuelto a sacar la navaja de la abstención al PP: “yo no voté a favor del PP, yo lo he apartado de las instituciones valencianas”, la ha respondido Ximo Puig.
En el debate también se ha planteado una cuestión de talante: Rafa García no se ha mostrado partidario de integrar a la candidatura rival si gana: “sólo a los mejores”. Ximo Puig ha recordado que él integró a sus opositores en el último Congreso, y que esa actitud la mantendrá si vence el domingo. Lo ha dicho el president poco después de mostrarle la pluma roja, la pluma que le puede dar la victoria en estas primarias. Al finalizar el debate, Rafa García ha salido rápido de la sede socialista, sin atender a los periodistas. El president sí ha dedicado un tiempo a valorar el debate con la prensa. Con la pluma roja ya guardada en el bolsillo.
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