La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (i),y el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro (d). (EFE)
El Ministerio de Hacienda, dirigido por Cristóbal Montoro, ha enviado este martes una carta al Ayuntamiento de Madrid informándoles de que a partir de ahora asumen el control semanal de las cuentas públicas del consistorio, según avanza el diario 'El País'. El ministerio alega en este sentido que el equipo de Carmena "no ha reconducido su senda de gasto, comprometiendo de forma reiterada el cumplimiento de la regla de gasto", por lo que se ve obligado a tomar esta medida.
La pelea entre el Ayuntamiento de Madrid y el Ministero de Hacienda se remonta al primer año de gobierno de la alcaldesa, en 2015, cuando su equipo incumplió el techo de gasto fijado por la Ley de Estabilidad. Un año después, en 2016, el consistorio volvió a superar el tope, y entonces Montoro respondiPara ello, Montoro se apoyó Ley de Estabilidad Presupuestaria, que obliga a los ayuntamientos a destinar todo el superávit a amortizar deuda, algo a lo que no estaba dispuesto el equipo de Manuela Carmena (Ahora Madrid). Ante esta negativa, Hacienda envió dos cartas al consistorio en noviembre: por un lado, pidió apartar 17,24 millones de euros por haber sobrepasado el gasto establecido en 2015 (el primer ejercicio de Carmena). Por otro, puso en duda el plan económico financiero de Madrid que incluía más gasto social los próximos años y amenazó con inhabilitaciones.
De todos modos, dichos escritos y la exigencia de pagar 17 millones no parecen haber apaciguado la pelea entre ambas partes, que ahora se ha saldado con la intervención de las cuentas del ayuntamiento por parte de Hacienda ó con una 'sanción' de 17 millones por el desvío de gasto.
Para ello, Montoro se apoyó Ley de Estabilidad Presupuestaria, que obliga a los ayuntamientos a destinar todo el superávit a amortizar deuda, algo a lo que no estaba dispuesto el equipo de Manuela Carmena (Ahora Madrid). Ante esta negativa, Hacienda envió dos cartas al consistorio en noviembre: por un lado, pidió apartar 17,24 millones de euros por haber sobrepasado el gasto establecido en 2015 (el primer ejercicio de Carmena). Por otro, puso en duda el plan económico financiero de Madrid que incluía más gasto social los próximos años y amenazó con inhabilitaciones.
De todos modos, dichos escritos y la exigencia de pagar 17 millones no parecen haber apaciguado la pelea entre ambas partes, que ahora se ha saldado con la intervención de las cuentas del ayuntamiento por parte de Hacienda.
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